FRANCISCO JAVIER ILLÁN VIVAS

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EL JURADO
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Cuando concedió el premio, supo que lo hizo bien: el ganador era él.


LA OTRA MEJILLA
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Siempre quiso poner la otra mejilla, pero la quemadura de ácido se lo impedía.


ARROJADO A LA GEHENNA
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Por más que lo intentaba, el muñón de su derecha le impedía cortarse la mano izquierda.


EL INVISIBLE
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Por mucho que lo pretendió, nadie supo jamás que él era invisible.
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(Relatos hiperbreves extraídos de la revista Ágora. Papeles de Arte Gramático, nº 14, 2009)

5 comentarios:

  1. Este post y el anterior me fascinaron; dejaron ese fueguito suave de satisfacción por dentro quemando.

    Gracias por seguir compartiendo arte!

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  2. Gracias, Joaquín.
    No tengo otras palabras mejores.

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  3. Gracias a ti, Max, por estar ahí, alegrándome de que los textos quemen.

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  4. Gracias a ti, Paco. No necesitas más palabras, esas son más que suficientes.

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