
RESTOS DE AMOR
En mi ropa en la manta en el sofá hay pelos
tuyos que se enredan sigilosos
atándome los pies, desatando los recuerdos
Los rastreo y recojo
y los he ido anudando
uno por uno, para hacerte un collar
que me sirva, de paso, como soga.
Lo ataré de noche a la bombilla del salón
subiré a una silla,
y después de meterme la cabeza, y proferir
las palabras de sobra conocidas
daré una leve patada, y veré entonces
si son débiles los lazos de nuestro amor.
(Niall Binns, Canciones bajo el muérdago, Editorial Estruendomudo, 2003)
La banda sonora perfecta para este poema: