ALBERTO CARIDE BROCAL
SPY CAM
Un cuerpo desnudo y de pronto
nunca será tan erótico como los labios
húmedos que jamás podrás besar.
Ahora comprendes por fin
por qué Adán y Eva
en poco tiempo se cansaron
de ser amantes de paraíso;
sin ropas que quitar
a dentelladas desesperadas,
uno se cansa de ser voyeur.
(Alberto Caride, Narciso despeinado, Azarbe, 2012)
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1 comentario:
Bueno, bueno querido Alberto. Un abrazo
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